Reiki
Una técnica de sanación milenaria, mediante la cual se canaliza la energía del universo a través de la imposición de las manos.
Tratar enfermedades y desequilibrios físicos, mentales y emocionales.
Armonizar, sanar la energía vital, conecta con la esencia de cada ser y su verdadero yo.
Permite comprender que el ser humano forma parte importante de un todo, de un gran tejido, de una inmensa red llamada universo.
REI significa universal y KI energía, dentro del término está reunido todo lo que en realidad es Reiki. Todo es energía, todo tiene que ver con ella, todo cuanto hacemos depende de ella. Somos energía y todos nuestros actos implican un aprovechamiento o desperdicio de ella.
Beneficios del Reiki
Estado de equilibrio, armonización y serenidad.
Estamos conformados por un cuerpo físico y otro energético, el reiki permite limpiar esos centros energéticos o mejor llamados chakras, provocando distensiones musculares, vitalidad y mayor energía.
Este efecto sanador ayuda a sacar las emociones reprimidas, algunos pacientes experimentan mucha alegría, cansancio e incluso algunos lloran liberando lo que no se debe estar cargando en el campo energético.
Se experimenta un cambio de frecuencia, se reduce el ritmo cardíaco y se aquieta la mente.
Un proceso de sanación o terapia reiki se da en mínimo tres sesiones, donde se experimentan sensaciones físicas y emocionales de acuerdo a las necesidades y dolencias particulares de cada paciente.
La terapia reiki se emplea en su mayoría para dolencias físicas crónicas, como migrañas, dolores de espalda, articulaciones, desordenes alimenticios, disfunciones en los órganos sexuales, etc. Y en el campo emocional la terapia reiki es muy utilizada en estados depresivos o para aliviar el estrés.